Clásicamente se ha descrito que la aparición de insuficiencia cardiaca tras un infarto de miocardio, confería un peor pronóstico a los pacientes. Este estudio, que siguió a 2.596 pacientes infartados sin antecedentes de insuficiencia cardiaca durante una mediana de 7,6 años, trata de valorar el impacto pronóstico del desarrollo de insuficiencia cardiaca en pacientes que han sufrido un infarto de miocardio.
En el seguimiento de esta cohorte, se vio una mayor mortalidad en aquellos que desarrollaban insuficiencia cardiaca (70% vs. 28%), comprobándose en el análisis multivariante (tras ajustar por diferentes variables) que el desarrollo de insuficiencia cardiaca duplicaba la probabilidad de muerte por cualquier causa (HR 2,49) y casi triplicaba la de muerte por causas cardiovasculares (HR 2,94). Por otro lado, se vio que no había influencia de la fracción de eyección en este comportamiento, siendo mayor la mortalidad en los casos en que la insuficiencia cardiaca aparecía tardíamente con respecto a los que aparecía de forma precoz. Interesante artículo que, aunque no aporta grandes novedades, refuerza varias ideas fundamentales que debemos tener en en cuenta en los pacientes infartados. En primer lugar, la insuficiencia cardiaca en el contexto del infarto tiene menor impacto pronóstico que su desarrollo durante el seguimiento y tratamiento óptimo, lo que tiene su lógica y suele corresponder con los pacientes que evolucionan peor. En segundo lugar, la insuficiencia cardiaca tiene un impacto pronóstico negativo claro independientemente de la fracción de eyección, aunque probablemente si se tuvieran en cuenta otros factores (muerte súbita, arritmias ventriculares, implante de desfibrilador, revascularización, viabilidad etc.) podrían encontrarse otros resultados. Por tanto, el adecuado manejo del síndrome coronario agudo, con las nuevas terapias farmacológicas y de revascularización, es fundamental, junto con la prevención primaria y secundaria, para tratar de retrasar la aparición de eventos cardiovasculares e insuficiencia cardiaca, que son factores conocidos de mal pronóstico. En el caso de aparición de insuficiencia cardiaca en el seguimiento, debemos intensificar la vigilancia, ya que sabemos que el pronóstico del paciente es peor.
Referencias:
- Circ Heart Fail. - Mortality Associated With Heart Failure After Myocardial Infarction: A Contemporary Community Perspective.
Comentario del Dr. Alberto Esteban Fernández
Cardiólogo en la Unidad de Insuficiencia cardiaca del Hospital Clínico San Carlos de Madrid. Especialista en Cardiología por la Clínica Universidad de Navarra, completando su formación en el Hospital 12 de Octubre de Madrid y en el Golden Jubilee National Hospital de Glasgow. Máster en Nutrición y Alimentación. Máster en Metodología de la investigación en Ciencias de la Salud. Ex miembro del Comité de residentes de la SEC. Licenciado en Medicina por la Universidad de Valladolid. Twitter: @doctorchecho