El artículo revisa el cribado cardiológico preparticipativo en deportistas recreativos, competitivos y de alto nivel en diferentes grupos de edad, con un enfoque en la detección temprana de trastornos cardiovasculares asociados a la muerte súbita cardiaca, fenómeno que aunque raro, puede ocurrir en personas con enfermedades cardiacas subyacentes activadas por el ejercicio. A continuación, desarrollo un resumen extenso de los principales temas abordados.
La actividad física regular disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares y mejora la calidad de vida, sin embargo, el ejercicio intenso en personas con problemas cardiacos latentes podría desencadenar arritmias malignas y provocar una muerte súbita cardiaca. En adultos jóvenes (menores de 35 años), la muerte súbita cardiaca está mayormente asociada con miocardiopatías y canalopatías, mientras que en personas de 35 años o más, el principal factor de riesgo es la enfermedad coronaria aterosclerótica.
El cribado preparticipativo tiene como objetivo identificar condiciones cardiovasculares que incrementen el riesgo de muerte súbita cardiaca en deportistas, permitiendo intervenciones o seguimientos específicos. A pesar de que su eficacia en mejorar el pronóstico a largo plazo es discutida, su implementación sigue recomendada por varias organizaciones deportivas y médicas internacionales. Las herramientas principales del cribado son una historia clínica detallada, exploración física y electrocardiograma de 12 derivaciones.
Definiciones y categorías de deportistas
Para una correcta evaluación del riesgo, es necesario categorizar a los deportistas en tres grupos principales:
- Jóvenes (menores de 35 años): Aquellos que practican deporte competitivo, pero no de élite.
- Máster (de 35 años o más): Deportistas que realizan ejercicio habitualmente o compiten a nivel no profesional.
- De alto nivel, élite o profesionales: Deportistas que entrenan y compiten a los niveles más altos, incluyendo representación nacional e internacional.
Cada grupo presenta diferentes patrones de riesgo y necesidades de cribado.
Recomendaciones de cribado para diferentes grupos de deportistas
Deportistas jóvenes (menores de 35 años)
Los jóvenes en edades tempranas desarrollan hábitos que definirán sus estilos de vida futuros. En este grupo, la muerte súbita cardiaca es rara pero representa un 10% de la mortalidad en adolescentes tras el primer año de vida. El cribado incluye:
- Historia clínica familiar y personal: Incluye antecedentes de muerte súbita, enfermedades hereditarias y problemas de salud en la infancia.
- Historia deportiva: Evaluación de patrones de entrenamiento, consumo de suplementos y el uso de sustancias que pueden afectar el sistema cardiovascular.
- Síntomas de alarma: Dolor torácico, síncope, disnea o palpitaciones deben evaluarse, especialmente si se presentan durante el ejercicio.
- Exploración física y electrocardiograma de 12 derivaciones: Un electrocardiograma puede detectar miocardiopatías o canalopatías con una alta sensibilidad. Se recomienda interpretar los resultados considerando la edad biológica y no la cronológica, ya que el desarrollo biológico puede variar considerablemente en adolescentes.
Deportistas máster (de 35 años o más)
Con la edad, aumenta el riesgo de muerte súbita cardiaca debido a la prevalencia de enfermedad coronaria aterosclerótica. Estudios como el MASS (Masters Athlete Screening Study) muestran que un 11,4% de los deportistas máster tienen alguna enfermedad cardiovascular al momento de la evaluación inicial. Las recomendaciones de cribado incluyen:
- Historia clínica detallada: Evaluación de síntomas específicos (disnea, dolor torácico, palpitaciones) y factores de riesgo como hipertensión y dislipidemia.
- Exploración física y electrocardiograma: El electrocardiograma puede revelar signos de infartos antiguos o de otras cardiopatías que requieren seguimiento. Los deportistas con alto riesgo cardiovascular pueden necesitar pruebas adicionales.
- Pruebas complementarias de segunda línea: La ergometría está indicada en deportistas máster con alto riesgo o antecedentes familiares de enfermedad coronaria aterosclerótica. También se recomiendan la ergoespirometría y el ecocardiograma transtorácico para aquellos con hallazgos de riesgo moderado o alto. La puntuación de calcio arterial coronario puede ayudar en la estratificación del riesgo en personas con hallazgos intermedios.
Deportistas de alto nivel, élite o profesionales
El cribado en estos deportistas requiere de un enfoque especializado, dado que sus adaptaciones cardiacas al entrenamiento intenso pueden confundirse con patologías. Las evaluaciones típicas incluyen:
- Historia clínica y exploración física específicas: Para diferenciar adaptaciones cardiacas de cardiopatías incipientes.
- Pruebas de esfuerzo y ecocardiografía: Estos exámenes son esenciales para descartar cardiopatías silentes y valorar las adaptaciones al entrenamiento. La evaluación puede incluir ergoespirometría para medir la respuesta cardiovascular y el consumo máximo de oxígeno.
- Holter de electrocardiograma: Recomendado en caso de bradicardia menor a 40 latidos por minuto, arritmias detectadas o presíncope. El uso del Holter permite monitorizar posibles alteraciones que pudieran representar un riesgo para la práctica deportiva a este nivel.
Otros aspectos del cribado
Educación y acceso a medidas de emergencia
Además de la evaluación cardiológica, el cribado preparticipativo proporciona una oportunidad para educar al deportista y a su entorno sobre:
- La prevención de enfermedades cardiovasculares.
- El manejo adecuado de síntomas de alarma y la instrucción en técnicas de reanimación cardiopulmonar.
- La disponibilidad de desfibriladores externos semiautomáticos en instalaciones deportivas es crucial, especialmente en competiciones y entrenamientos.
Herramientas tecnológicas y dispositivos de monitoreo
Los dispositivos digitales que miden el ritmo cardiaco están ganando popularidad, especialmente entre deportistas máster, y pueden ser útiles para la detección de fibrilación auricular subclínica mediante fotopletismografía o electrocardiograma de una sola derivación. Sin embargo, su eficacia en el cribado de deportistas asintomáticos aún no tiene suficiente respaldo científico.
Importancia de una aproximación multidisciplinar
La aptitud para la práctica deportiva debe evaluarse en consenso con el deportista, su club y, cuando corresponda, el sistema sanitario, especialmente en deportistas de alto nivel o profesionales. Se recomienda una periodicidad de cribado anual para estos deportistas, adaptada a las demandas específicas de cada disciplina deportiva y a los hallazgos del cribado preparticipativo.
Conclusiones
El cribado preparticipativo en deportistas es una herramienta que permite identificar a individuos en riesgo de muerte súbita cardiaca y prevenir posibles eventos cardiovasculares graves. Si bien existen controversias sobre su eficacia general, las recomendaciones actuales apuntan a una implementación adaptada a la edad, el nivel de competición y la disciplina del deportista, con especial énfasis en aquellos grupos de mayor riesgo.
Se recomienda que el cribado sea realizado por cardiólogos con experiencia en cardiología deportiva, y que se cuente con un plan de actuación urgente en los casos de muerte súbita cardiaca o eventos cardiovasculares imprevistos. Además, es fundamental que el cribado se complemente con educación en prevención y primeros auxilios, asegurando así la seguridad y el bienestar de los deportistas en todos los niveles de competición.
Referencias:
- REC CardioClinics. - Cribado cardiológico preparticipativo en deportistas recreativos, competitivos y de alto nivel en diferentes grupos de edad