Las asistencias ventriculares han evolucionado en los últimos años hacia modelos más pequeños y con menor tasa de complicaciones. El flujo continuo es el más recomendable, y los mejores resultados (mayor hemocompatibilidad y menor morbimortalidad) se han conseguido con la asistencia HeartMate III, que es la única actualmente en el mercado. Se trata de una bomba pequeña de flujo centrífugo, con levitación magnética que ha conseguido mantener a más de la mitad de los pacientes libres de eventos adversos a 5 años de seguimiento. También ha mejorado la supervivencia, siendo del 73.2% a 2 años. Las asistencias, no sólo consiguen mejoría de la morbimortalidad, sino también de la clase funcional y calidad de vida, que al final es uno de los principales factores limitantes en este grupo de pacientes con insuficiencia cardiaca avanzada.
Elegir al candidato adecuado es complicado. Debemos “tener motivos” para optar por la cirugía de implante (múltiples descompensaciones de insuficiencia cardiaca, datos de avanzada, etc.), sin llegar a realizarlo “demasiado tarde” (fracaso renal o hepático establecido, etc.). Por otro lado, un paciente portador de asistencia demanda una atención sanitaria muy frecuente y detallada.
Por ello, de todos los puntos que debemos evaluar, quizá el más importante sea la fragilidad, dada la edad habitual de implante. Existen múltiples escalas que pueden emplearse, siempre acompañadas de un abordaje multidisciplinar. Además, debemos prestar especial atención al ámbito psicosocial, pues lo ideal es que tanto pacientes como familiares sean capaces de realizar las curas y cuidados básicos del dispositivo, detectando las principales complicaciones por las que deberían consultar.
En cuanto a las comorbilidades, será necesario hacer un estudio minucioso de los principales órganos involucrados (riñón, hígado), con objetivo de demostrar la reversibilidad del daño presentado. Finalmente, uno de los puntos clave, es la función del ventrículo derecho que debe ser aceptable para tolerar la asistencia ventricular izquierda. Para ello, será necesario un estudio por imagen y hemodinámica, pudiendo optimizarse con diuréticos e inotrópicos si fuese necesario.
Referencias:
- Life 2023. - Left Ventricular Assist Device as a Destination Therapy: Current Situation and the Importance of Patient Selection