Los iSGLT2 constituyen en la actualidad un pilar fundamental en el tratamiento de la insuficiencia cardiaca independientemente de la función ventricular izquierda. Los cambios dinámicos en la función renal a lo largo del tiempo pueden hacer que en esa población se observe un deterioro del filtrado glomerular hasta niveles inferiores a aquellos en los que estos tratamientos han demostrado ser efectivos y seguros, especialmente en pacientes con enfermedad renal crónica acompañante.
En este análisis post-hoc preespecificado aunando los datos de los ensayos clínicos DAPA HF (pacientes ≥18 años con insuficiencia cardiaca sintomática, FEVI ≤40% y péptidos natriuréticos elevados) y DELIVER HF (pacientes ≥40 años con insuficiencia cardiaca sintomática, FEVI >40%, péptidos natriuréticos elevados, alteración estructural y uso al menos intermitente de diuréticos), se examina la eficacia y seguridad de mantener el tratamiento con dapagliflozina cuando el filtrado glomerular estimado se reduce en el seguimiento por debajo del valor establecido como límite para su uso de <25 ml/min/1.73m2.
Entre los 11.007 pacientes evaluados, 347 (3,2%) experimentaron un deterioro de filtrado estimado por CKD <25 ml/min/1,73m2 al menos una vez durante el seguimiento. Pese a que cabría esperar un descenso precoz por el efecto farmacológico de dapagliflozina, el tiempo medio hasta su aparición fue de 120 días, sin diferencias entre los pacientes tratados o con placebo. La mayoría de los pacientes no discontinuaron y se mantuvieron en su brazo asignado de forma equilibrada permitiendo el análisis de la evolución.
Los pacientes que experimentaron el deterioro de filtrado eran mayores, con mayor proporción de mujeres y diabéticos, mayor elevación de NTproBNP, mayor grado de insuficiencia renal basal y menores tasas de tratamiento óptimo de insuficiencia cardiaca (IECA/ARAII, ARNI, ARM y betabloqueantes). Estos pacientes presentaron un riesgo muy aumentado del evento primario combinado de muerte cardiovascular, hospitalización por insuficiencia cardiaca o empeoramiento de IC que precisase tratamiento urgente (HR 1,87; IC 95%: 1,48-2,35; p=0.001).
El tratamiento mantenido con dapagliflozina se asoció a una reducción significativa del riesgo, mayoritariamente a expensas de una reducción en la hospitalización, tanto en los pacientes que presentaron deterioro del filtrado glomerular (HR 0,53; IC 95%:0,33-0,83) como en aquellos que no (HR: 0,78; IC 95%:0,72-0,86, p interacción 0,17).
En términos de seguridad, no se observaron diferencias significativas en efectos adversos, incluyendo aquellos asociados a discontinuación de tratamiento, entre los grupos con o sin deterioro del filtrado, Dentro de cada uno de éstos, el uso de dapagliflozina respecto a placebo tampoco provocó diferencias relevantes.
En conclusión, los pacientes con insuficiencia cardiaca que experimentan en el seguimiento un deterioro del filtrado glomerular hasta valores <25 ml/min/1,73m2 tienen un riesgo elevado de complicaciones cardiovasculares mayores y son una población que precisa de un seguimiento planificado y exhaustivo.
Corregir las posibles causas asociadas de deterioro (p.e. hipotensión arterial) manteniendo el tratamiento con dapagliflozina puede ayudar a reducir de forma muy significativa la incidencia de eventos de forma segura.
Los resultados de diversos ensayos clínicos en marcha (p.e. LIFECYCLE) ayudarán en un futuro cercano a establecer la utilidad del dapagliflozina en pacientes con enfermedad renal crónica en estadio V, diálisis o trasplantados renales.
Referencias:
- Journal of the American College of Cardiology. - Dapagliflozin in Patients With Heart Failure and Deterioration in Renal Function