Serie "5 minutos de Oro" con Pilar Sánchez sobre el síndrome de la anemia cardiorrenal; organizada por la Unidad de IC Avanzada y Trasplante del Hospital Universitari i Politècnic La Fe de Valencia.
La anemia es una comorbilidad frecuente en el síndrome cardiorrenal, y su presencia agrava el pronóstico, aumentando la mortalidad y hospitalización en estos pacientes. Los factores que contribuyen a la anemia en este síndrome incluyen una producción reducida de eritropoyetina, una resistencia a esta hormona debido a la inflamación y a la hipoperfusión de la médula ósea, y dificultades en la absorción y metabolismo del hierro, principalmente debido a niveles elevados de hepcidina.
El manejo de la anemia en el síndrome cardiorrenal es complejo y carece de guías clínicas específicas. Sin embargo, una parte fundamental del tratamiento incluye la corrección del déficit de hierro mediante suplementación intravenosa, especialmente en casos de ferropenia funcional. Este tipo de ferropenia es común en el síndrome cardiorrenal y se caracteriza por niveles bajos de saturación de transferrina y ferritina normal o elevada.
En cuanto a los agentes que estimulan la eritropoyesis, existen preocupaciones sobre su seguridad debido al riesgo de efectos adversos cardiovasculares, especialmente cuando se utilizan dosis elevadas. Nuevos tratamientos, como los inhibidores de la prolil hidroxilasa y los inhibidores del cotransportador sodio-glucosa, han mostrado potencial para mejorar la anemia y reducir el riesgo cardiovascular.
En conclusión, la anemia en el síndrome cardiorrenal requiere un manejo cuidadoso, enfocándose en la suplementación de hierro y evaluando individualmente la necesidad de agentes eritropoyéticos. La investigación continúa para optimizar el tratamiento y mejorar la calidad de vida de los pacientes afectados por esta condición multifactorial.