Estudio STRIP: Buscando la salud cardiovascular ideal en el adolescente
Estudio donde se objetivó si la intervención mediante medidas higiénico-dietéticas en la población adolescente promovía un mejor control de los parámetros de riesgo cardiovascular. Los autores objetivaron menor enfermedad vascular en aquellos adolescentes sometidos a la intervención.
A pesar de los avances en el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares, se ha demostrado previamente como las medidas de prevención primaria suponen el método más eficaz para disminuir la carga de enfermedad cardiovascular en la población. Este hecho adquiere mayor relevancia entre la población adolescente. Así, la Sociedad Americana de Cardiología desde el año 2010 promueve 7 medidas para la población: no fumar, ser físicamente activo, un índice de masa corporal normal, buen control de la presión arterial, del colesterol total y de los niveles de glucemia. Aunque es bien conocido desde los estudios de Framinghan que a mayor número de medidas menor enfermedad cardiovascular, existen pocos datos en la población adolescente. Con este análisis, el estudio STRIP (“Special Turku Coronary Risk Factor Intervention Project for Children”) pretendió evaluar la prevalencia de las 7 medidas mencionadas previamente en una población adolescente, así como su relación con la “salud vascular”, analizada mediante el grosor íntima-media (GIM) y su elasticidad. En este estudio longitudinal aleatorizado se obtuvieron datos de adolescentes de 15 (n=394), 17 (n=376) y 19 años (n=298). Ninguno de los adolescentes evaluados presentó las 7 medidas recomendadas. Al menos 5 de las recomendaciones fueron encontradas en el 60,2%, 45,5% y 34,2% de los adolescentes de 15, 17 y 19 años, respectivamente. Los adolescentes en el grupo control presentaron un menor número de medidas recomendadas (< 3 medidas) en comparación con el grupo de intervención (RR=1,35; IC 95%: 1,04-1,77). El número de recomendaciones se asoció de manera inversamente proporcional con el GIM (p<0,0001) y directamente proporcional con la elasticidad de la arteria (p=0,045). Además, el riesgo de presentar un GIM elevado (definido por encima del percentil 85) fue casi el doble en los adolescentes con un menor número de medidas (RR=1,78; IC 95%: 1,31-2,43). A la vista de estos resultados, los autores concluyen que la salud ideal cardiovascular según las recomendaciones de la Sociedad Americana de Cardiología puede y debe ser promovida en los adolescentes. Este hecho se asocia de manera significativa a una menor progresión de la enfermedad cardiovascular. Con los datos del estudio STRIP se da un pequeño paso más hacia lo que en los últimos trabajos publicados se ha mostrado como el punto más importante para conseguir un estado de salud óptimo en nuestra población: la prevención cardiovascular.
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