Comentario de los Autores: Dres. Julia Rey Brandariz, Agustín Montes, Alberto Ruano Raviña y Mónica Pérez-Ríos
El tabaco es la droga legal que más muerte causa en el mundo, más de 8 millones al año. Con el objetivo de erradicar el consumo de tabaco, la Organización Mundial de la Salud, dentro del Convenio Marco para el control del Tabaco, diseñó la estrategia MPOWER formada por 6 medidas. La primera letra de MPOWER, la M, hace referencia a la monitorización o vigilancia de la evolución de la epidemia de tabaco en una población. Esta vigilancia se puede realizar en varios ámbitos: a) mediante la prevalencia de extensión del consumo a partir de la monitorización de la prevalencia; o b) evaluando los efectos del consumo de tabaco en la salud mediante la estimación de la mortalidad.
En España, desde 1978 diferentes estudios han estimado la mortalidad atribuida al consumo de tabaco a nivel nacional, sin embargo, hasta ahora, no se disponía de estimaciones para las 17 comunidades autónomas que forman España en un mismo año y aplicando una metodología de cálculo común. Es por ello que hemos realizado un estudio para conocer la situación actual.
En 2017, el consumo de tabaco causó en España 53.825 muertes en población de 35 años y más, si bien la carga de mortalidad atribuida a su consumo varía en función de la comunidad autónoma. En valores absolutos, las comunidades más pobladas son las que presentan un mayor número de muertes atribuidas al consumo de tabaco. Sin embargo, cuando contextualizamos los datos teniendo en cuenta la relación entre mortalidad producida por enfermedades asociadas causalmente al consumo de tabaco con la atribuida al propio consumo, es Canarias la comunidad en la que el tabaco más impacta en sus cifras de mortalidad. En Canarias, el 30,1% de la mortalidad observada por las causas asociadas al consumo de tabaco fue atribuida al consumo de tabaco. Por otro lado, la Rioja es la comunidad en la que la carga fue menor, allí el 22,0% de la mortalidad observada fue atribuida al consumo de tabaco. En todas las comunidades autónomas, el impacto del consumo de tabaco fue mayor en hombres que en mujeres.
El consumo de tabaco impacta de forma importante en la mortalidad por tumores y por enfermedades cardiovasculares y diabetes mellitus. Sin embargo, la contribución relativa de cada una de estas causas es diferente entre comunidades autónomas. Así, en Cantabria el 55,3% de la mortalidad atribuida al tabaco se asoció a tumores y el 25,0% a enfermedades cardiovasculares y diabetes mellitus; en Andalucía, estos porcentajes fueron del 46,7% y del 31,3%, respectivamente. La diferencia porcentual varía entre estos dos grandes grupos de causas de muerte en estas dos comunidades autónomas y, por lo tanto, varía entre 30,3 puntos porcentuales en la primera y 15,4 en la segunda. Visto desde otro punto de vista podemos decir que por cada muerte atribuida al consumo de tabaco por enfermedades cardiovasculares y diabetes mellitus en Cantabria se atribuyen 2,2 por tumores, mientras que en Andalucía este valor es de 1,5.
El consumo de tabaco es responsable de un elevado número de muertes en todas las comunidades autónomas, si bien su análisis detallado nos permite identificar cómo varía tanto en número como por causa de defunción. Es necesario reforzar todas las políticas centradas en la eliminación del consumo de tabaco, además de continuar monitorizando la mortalidad atribuida en cada comunidad autónoma. Esta monitorización continua permitirá desarrollar y/o evaluar medidas de prevención frente al inicio de consumo y favorecedoras del cese, adecuadas a las necesidades de cada una de ellas.
Referencias:
- Rev Esp Cardiol. - Mortalidad atribuida al consumo de tabaco en las comunidades autónomas de España, 2017.
Comentario de los Autores: Dres. Julia Rey Brandariz, Agustín Montes, Alberto Ruano Raviña y Mónica Pérez-Ríos
Todos los autores pertenecen al área de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Santiago de Compostela. Una de sus líneas de investigación se centra en la estimación de la mortalidad atribuida a factores de riesgo en áreas pequeñas, proyecto financiado por el FIS (FIS PI19/00288).