La hipertensión arterial pulmonar sigue siendo hoy una enfermedad de especial mal pronóstico, ello a pesar de un mejor conocimiento de la enfermedad y de la disponibilidad de tratamiento específico, consistente en vasodilatadores pulmonares, cuyas dianas se sitúan a nivel de las tres vías que sabemos se encuentran involucradas en la patogénesis de la enfermedad: la vía del óxido nítrico, la de la prostaciclina y la de la endotelina.
Sotatercept es una proteína que actúa a través de una vía novedosa, atrapando activinas y factores de diferenciación del crecimiento implicados en el desarrollo de la hipertensión arterial pulmonar, mitigando el disbalance entre proliferación y apoptosis de las células endoteliales y musculares lisas que experimentan estos pacientes.
El estudio STELLAR es un ensayo multicéntrico, doble ciego, de fase 3, en 323 adultos con hipertensión arterial pulmonar sintomática, en clase funcional II o III de la OMS, que estaban recibiendo tratamiento vasodilatador pulmonares estable y que fueron asignados aleatoriamente en una proporción de 1:1 para recibir sotatercept por vía subcutánea o placebo cada 3 semanas.
Se trata de un estudio que pretendía demostrar la seguridad y eficacia de sotatercept en este escenario, planteaba como objetivo primario la mejoría en la distancia recorrida en el test de 6 minutos a las 24 semanas de iniciado el tratamiento. Se fijaron, además, hasta nueve objetivos secundarios que se interpretaban de forma jerárquica y que incluían, entre otros, cambio en resistencias pulmonares, péptidos natriuréticos, combinados de morbimortalidad…
Se demostraba mejoría del objetivo primario de distancia recorrida en 40,8m (IC del 95 %, 27,5 a 54,1; P <0,001) con sotatercept respecto al placebo. Respecto a los objetivos secundarios, Sotatercept demostró clara superioridad respecto al placebo. Destaca una diferencia significativa en cuanto al tiempo hasta la aparición del primer episodio de empeoramiento clínico no fatal o la muerte, con una reducción de riesgo de hasta el 84%. En este sentido, podemos comprobar que las curvas de supervivencia se separaban tempranamente, aproximadamente en la semana 10, separándose aún más las curvas hasta el final del estudio.
Respecto a la seguridad, la adherencia al fármaco fue muy buena, los efectos secundarios más habituales relacionados con sotatercept vinieron representados por epistaxis, gingivorragias, telangiectasias y mareos.
Referencias:

Carlos Israel Chamorro Fernández