Los diuréticos endovenosos son fármacos de primera elección en el manejo de la congestión en el paciente con IC aguda.
Un tema de discusión sigue siendo si es mejor administrar los diuréticos en bolo o infusión continua, por suponerse que esta última produce una respuesta diurética más sostenida, con menor activación neurohormonal, disbalance electrolítico y riesgo de efectos adversos como la ototoxicidad. Uno de los estudios que más recientemente ha evaluado esto es el estudio DOSE en el que no hubo diferencias en la mejora sintomática entre infusión continua y bolos aunque sí un mayor beneficio sintomático con alta dosis de furosemida comparado con dosis bajas, pero con mayor aumento de la creatinina y sin diferencia significativa en la evolución de los pacientes.
Sin embargo, la forma de administración más beneficiosa sigue siendo tema de debate y, en esta línea, se acaba de publicar este pequeño ensayo clínico randomizado, con 80 pacientes, ingresados por IC aguda ( NYHA IV, FEVI < 30 %). Los pacientes incluidos debían tener alto riesgo de resistencia a diuréticos, definida con los siguientes criterios: TAS < 110 mmhg, un wet score <12/18 (sistema de puntuación que cuantifica el grado de congestión) y sodio <135 mmol/L. Los pacientes fueron randomizados a dos grupos bien a recibir furosemida en bolos cada 12h (dosis media de furosemida diaria 195 mg) o bien a recibir infusión continua durante 72 h (dosis media de furosemida diaria 216 mg) y el objetivo coprimario fue el volumen urinario y la ausencia de congestión clínica a las 72h.
Los datos indicativos de mayor descongestión fueron mayores en el grupo de infusión continua que en el de bolos tanto medido por signos clínicos de descongestión: como presión venosa yugular de <8 cm, sin ortopnea y sin edema (48% vs. 25%, p = 0.04) como por gasto urinario a las 72 h (8612 ± 2984 ml grupo bolos y 10,020 ± 3032 ml en el grupo de infusión continua (p = 0.04).
Este trabajo, aunque con las limitaciones inherentes a un estudio de pequeño tamaño y monocéntrico, es el primero en demostrar algo que se viene percibiendo en práctica clínica , el beneficio de la infusión continua de furosemida en el manejo de la congestión en el paciente con insuficiencia cardiaca aguda. Mayores estudios y ensayos clínicos randomizados serán necesarios para terminar de definir en esta línea los beneficios de las diferetnes formas de administración diurética en este escenario clínico.
Referencias:
Comentario de la Dra. Carolina Ortiz Cortés
Licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Extremadura. Máster Universitario en investigación en ciencias de la salud por la UNEX. Master en Insuficiencia Cardiaca por la UIMP. Cardióloga en el Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres, responsable de la Unidad de Insuficiencia Cardiaca. Editora científica de @Cardioteca.