Comentario del Autor: Dr. Javier Higueras
Durante años de docencia en el mundo del electrocardiograma hemos detectado que uno de los problemas más recurrentes es analizar correctamente el ECG de pacientes que portan marcapasos. Esto es así porque hay muchos tipos de marcapasos distintos, muchas maneras de programarlos, diferentes tipos de problemas… y genera mucha inseguridad en médicos no cardiólogos, e incluso en cardiólogos no arritmólogos.
Para ello realizamos este estudio que hemos publicado en Cardiology Journal (Higueras et al, DOI: 10.5603/CJ.a2018.0079 ). La regla que validamos en este trabajo dice lo siguiente. Un paciente que lleva un marcapasos no tiene ningún problema con él si en su ECG de superficie NO tiene ninguno de los siguientes:
- Taquicardia con espigas (“T”): QRS estimulados con una espiga de marcapasos previa a más de 120 lpm.
- Bradicardia sin espigas (“B”): QRS a menos de 40 lpm sin que se observen espigas de marcapasos.
- Caos (“C”): entendido como presencia de espigas en mitad de QRS-T, que detrás de la espiga no haya QRS o que haya diferente distancia entre las espigas y los QRS.
- La primera es de validación de la regla. Para ella se obtuvieron de manera consecutiva los ECGs de los últimos 100 pacientes en los que, tras revisión del dispositivo, se había documentado un marcapasos normofuncionante, y los últimos 51 pacientes en los que se había documentado un marcapasos disfuncionante. La precisión diagnóstica para diagnosticar disfunción de marcapasos fue alta, con una sensibilidad del 86%, especificidad del 94%, valor predictivo positivo de 88%, y 93% de valor predictivo negativo.
- La segunda parte fue comprobar que el algoritmo mejora la precisión diagnóstica de los médicos no cardiólogos, así como el manejo de dichos pacientes. Para ello se probó en una población de 61 médicos no cardiólogos que acudieron a un curso de ECG. La población tenía una edad media de 31,5 años, habían trabajado como médicos 6,1 años. A los participantes se les daba un curso general de cardiología, que incluía una lección “clásica” de fallos de dispositivos. Se les pasaba un test de 5 ECGs que contenían marcapasos con y sin disfunción. Los participantes tenían que responder a dos preguntas 1) si el marcapasos funcionaba bien (si/no); 2) si enviarían al paciente a revisión urgente / adelantar su cita / mantener la cita que tenía programada. Después, sin que conocieran la respuesta a este test, se les explicó el método TBC y se volvió a pasar el mismo test. El número de respuestas correctas mejoró de 3,7 a 4,5 (p<0,001), y se invrementó el número de médicos que diagnosticaron correctamente los 5 ECG del test (de 9 a 36). Del mismo, modo mejoró la correcta derivación de los pacientes de un 57,4 inicial a un 83% tras el curso (p<0,001).
Referencias:
- Cardiology Journal. - TBC: A simple algorithm to rule out abnormalities in electrocardiograms of patients with pacemakers.
Comentario del Dr. Javier Higueras

Cardiólogo, Hospital Clínico San Carlos Madrid. Cardiólogo clínico. Tutor de Residentes de Cardiología. Investigador clínico en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), Madrid.