Un tema bastante controvertido en la práctica clínica, es el manejo antitrombótico de los pacientes a los que se implanta una prótesis biológica, y que no tienen indicación de antiagregación o anticoagulación por otras causas. A este debate, donde no existe una clara respuesta basada en la evidencia, se han unido también nuevas dudas, como por ejemplo la utilidad de los anticoagulantes de acción directa en este contexto.

En este metaanálisis (31.740 pacientes) se evaluó el beneficio en términos de eficacia y seguridad del tratamiento anticoagulante (anti vitamina K) frente al tratamiento antitrombótico o no tratamiento. Se observó que no existían diferencias en la tasa de eventos entre ambas estrategias, no habiendo por tanto evidencia de añadir tratamiento anticoagulante a estos pacientes. Además, el grupo de anticoagulación presentó un mayor riesgo de sangrado. Hubiera resultado interesante conocer en profundidad los datos del subgrupo que no recibió ningún tipo de tratamiento. Por tanto, parece razonable mantener con tratamiento antiagregante únicamente a los pacientes con bioprótesis, a no ser que haya indicación de anticoagulación por otra causa. En futuros estudios, además, se valorará el papel de antiagregantes como Ticagrelor o Prasugrel en este contexto.
Referencias:
Comentario del Dr. Alberto Esteban Fernández

Cardiólogo en la Unidad de Insuficiencia cardiaca del Hospital Clínico San Carlos de Madrid. Especialista en Cardiología por la Clínica Universidad de Navarra, completando su formación en el Hospital 12 de Octubre de Madrid y en el Golden Jubilee National Hospital de Glasgow. Máster en Nutrición y Alimentación. Máster en Metodología de la investigación en Ciencias de la Salud. Ex miembro del Comité de residentes de la SEC. Licenciado en Medicina por la Universidad de Valladolid. Twitter: @doctorchecho