Comentario de los Autores: Noelia Fernández Villa y Francisco José Pastor Pérez
La resolución de la congestión es un objetivo fundamental en los pacientes hospitalizados por insuficiencia cardíaca (IC), dado que su persistencia al alta se asocia con un mayor riesgo de eventos adversos. En ocasiones, es necesario recurrir a combinaciones de diuréticos para alcanzar la euvolemia, entre las cuales puede considerarse el uso de la acetazolamida. En España, solo está comercializada la presentación oral de este fármaco, la cual ha demostrado ser eficaz tanto en pacientes con IC crónica y congestión refractaria como en IC aguda. Sin embargo, el papel de la formulación intravenosa en el contexto de la IC aguda en nuestro medio estaba poco definido, ya que, aunque puede obtenerse mediante fórmula magistral, su utilización en la práctica clínica es poco habitual en nuestro entorno.
Por ello, el objetivo de nuestro trabajo fue evaluar la eficacia y seguridad de la acetazolamida intravenosa en pacientes con IC aguda y congestión persistente en vida real.
De forma retrospectiva, se incluyeron los pacientes que ingresaron por IC en el Servicio de Cardiología de nuestro centro entre los años 2022 y 2023, que presentaban congestión persistente a pesar del uso de diuréticos de asa y que recibieron al menos una dosis de acetazolamida intravenosa durante la hospitalización, a criterio del médico responsable.
Se evaluaron las cifras de tensión arterial, los valores analíticos, el peso y el volumen de diuresis antes y después de la administración de la acetazolamida. Adicionalmente, se llevó a cabo un modelo de regresión logística para predecir los factores relacionados con el aumento del volumen de diuresis durante las 48 horas siguientes al uso del fármaco.
De las 329 hospitalizaciones por IC en el periodo de estudio, se administró acetazolamida intravenosa en 88 (26%) casos, correspondientes a 81 pacientes individuales. La dosis media diaria de acetazolamida intravenosa que recibieron los pacientes fue de 380 ± 123 mg, iniciada a los 2 [1-7] días del ingreso y pautada durante 1 [1-3] días.
La diuresis diaria promedio se incrementó en casi medio litro durante las 48 horas posteriores a su administración, y en una cuarta parte de los pacientes este aumento fue superior a un litro. Los pacientes con mejor respuesta diurética fueron aquellos con peor función renal. De hecho, en el análisis multivariante, la tasa de filtrado glomerular ≤ 30 ml/min/1,73 m2 fue el único predictor independiente del aumento del volumen de diuresis tras el uso de la acetazolamida intravenosa (OR 4,10; IC 95% 1,29-13,00; p = 0,017). Además, es importante destacar que casi 8 de cada 10 pacientes alcanzaron una descongestión adecuada al alta empleando únicamente diuréticos, considerando no solo criterios clínicos, sino también criterios ecográficos para evaluar la congestión. Por último, el uso de acetazolamida fue seguro, sin observar cambios significativos en las cifras de tensión arterial ni alteraciones iónicas relevantes tras su administración.
En resumen, los resultados de nuestro trabajo muestran que la adición de la acetazolamida intravenosa es eficaz y segura en pacientes hospitalizados por IC aguda con congestión persistente. A pesar de las limitaciones propias de un registro observacional retrospectivo y unicéntrico, se trata del primer estudio que evalúa los resultados de la formulación intravenosa en este escenario en nuestro medio, con una eficacia observada similar a la del estudio pivotal ADVOR. Cabe destacar que el mayor incremento del volumen de diuresis se observó entre los pacientes con insuficiencia renal, hallazgos concordantes con los objetivados en un subanálisis de dicho ensayo, lo que apoya su especial utilidad en este colectivo. Finalmente, cabe mencionar que no se observó un efecto modificador independiente de la eficacia de la acetazolamida con el uso concomitante de los inhibidores del cotransportador sodio-glucosa tipo 2 (iSGLT2), hallazgo que consideramos de interés, dado que los pacientes con iSGLT2 fueron excluidos del ensayo ADVOR.
Referencias:
- Rev Esp Cardiol. - Acetazolamida intravenosa en pacientes con insuficiencia cardíaca aguda y congestión persistente.
Noelia Fernández Villa
Francisco José Pastor Pérez































