Se trata de un documento de consenso japonés multidisciplinario (realizada por cardiólogos y nefrólogos) sobre el manejo óptimo de la hiperpotasemia en pacientes con insuficiencia cardiaca y enfermedad renal crónica, que pretende homogeneizar las prácticas clínicas para así poder conseguir un manejo seguro y adecuado de los inhibidores del sistema renina-angiotensina-aldosterona (RAASi) en este perfil de pacientes.
Para ello se realizó una encuesta a 250 cardiólogos y nefrólogos certificados, y se logró consenso en 21 de las 26 afirmaciones (81%), lo que ha permitido obtener las siguientes conclusiones:
- Tratar la hiperpotasemia sin interrumpir RAASi siempre que sea posible.
- Priorizar el uso de quelantes del potasio antes de reducir dosis de RAASi.
- Definir umbral de acción en K⁺ >5.5 mEq/L.
- Monitorizar los niveles de K⁺ regularmente (al menos cada 3 meses) evitar fármacos no modificadores de la enfermedad que inducen hiperpotasemia (AINEs, suplementos vegetales).
- Fomentar la creación de unidades cardiorrenales y la unificación de las guías de práctica clínica
Este documento de consenso japonés redefine la hiperpotasemia como una condición tratable y no limitante y establece una guía práctica para mantener los RAASi pese a la hiperpotasemia mediante el uso de los quelantes del potasio y un manejo multidisciplinar a través de la creación de las unidades cardiorrenales.
Supone un cambio de paradigma: de una visión reactiva (suspender RAASi) a una proactiva, integradora y basada en evidencia, orientada a la protección cardiorrenal integral.
Referencias:
Julia Seller Moya





























