Los inhibidores del cotransportador de sodio y glucosa 2 (iSGLT2) son fármacos con un beneficio cardiovascular incuestionable. Recientemente además se ha demostrado el beneficio pronóstico en todo el espectro de pacientes con insuficiencia cardiaca, independientemente de su FEVI.
El mecanismo de acción sigue siendo desconocido, aunque se han apuntado múltiples hipótesis. Cada vez hay más pruebas que sugieren efectos beneficiosos sobre el remodelado miocárdico y la función cardíaca, pero todavía no se ha investigado el impacto de la empagliflozina iniciada tempranamente tras un infarto agudo de miocardio (IAM).
El estudio EMMY fue diseñado para investigar la eficacia y seguridad de la empagliflozina en pacientes diabéticos y no diabéticos después de un IAM grave.
Se trata de un ensayo multicéntrico, aleatorizado, doble ciego, controlado con placebo, que incluyó a 476 pacientes con IAM y características sugestivas de necrosis miocárdica grave (gran elevación de la creatina-cinasa >800 U/L) aleatorizados dentro de las 72 horas posteriores a la intervención coronaria percutánea a empagliflozina (10 mg una vez al día) o a un placebo equivalente. El objetivo primario fue el impacto de empagliflozina en los cambios del NT-proBNP en los 6 meses posteriores al IAM. Los objetivos secundarios incluyen los cambios en los parámetros ecocardiográficos, los niveles de cuerpos cetónicos, los niveles de HbA1c y el peso corporal. La tasa de hospitalización por insuficiencia cardíaca u otras causas, la duración de la estancia hospitalaria y la mortalidad por todas las causas se evaluron como criterios de valoración secundarios exploratorios.
La mediana del NT-proBNP fue de 1.294 (757-2.246) pg/ml. La reducción del NT-proBNP fue significativamente mayor en el grupo de empagliflozina, en comparación con el de placebo, siendo un 15% menor (intervalo de confianza [IC] del 95%: -4,4% a -23,6%) tras ajustar por el NT-proBNP basal, el sexo y el estado de la diabetes (p = 0,026). Además se observó una mejoría de la FEVI (1,5%, IC del 95%: 0,2% a 2,9%, p = 0,029). Los volúmenes telesistólico y telediastólico del ventrículo izquierdo fueron inferiores en 7,5 ml (IC del 95%: 3,4 a 11,5 ml, p = 0,0003) y 9,7 ml (IC del 95%: 3,7 a 15,7 ml, p = 0,0015), respectivamente, en el grupo de empagliflozina, en comparación con el de placebo. Hubo una reducción media del E/e' del 6,8% (IC del 95%: 1,3% a 11,3%, p = 0. 015). Siete pacientes fueron hospitalizados por insuficiencia cardíaca (tres en el grupo de empagliflozina). No se observaron diferencias en eventos adversos graves entre los grupos.
Por lo tanto, el ensayo EMMY apoya una de las hipótesis sobre el mecanismo de acción de los SGLT2: la mejora el remodelado cardíaco, independientemente de sus efectos antidiabéticos. Los autores concluyen que en los pacientes con un infarto de miocardio reciente, la empagliflozina se asoció a una reducción significativamente mayor del NT-proBNP durante 26 semanas, acompañada de una mejora de los parámetros funcionales y estructurales ecocardiográficos.
Referencias:
Comentario de la Dra. Carolina Ortiz Cortés
Licenciada en Medicina y Cirugía. Máster Universitario en investigación en ciencias de la salud por la UNEX. Master en Insuficiencia Cardiaca por la UIMP. Cardióloga en el Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres, responsable de la Unidad de Insuficiencia Cardíaca. Coordinadora del Proceso Asistencial de la Insuficiencia Cardíaca en Extremadura. Vicesecretaria de la Sociedad Española de Cardiología. Editora científica de @Cardioteca.