Un candidato típico para someterse a una cardioneuroablación, en la población de unos 500 pacientes descrita hasta la fecha en la literatura, es un paciente afectado de síncope reflejo recurrente gravemente sintomático, de entre 18 y 60 años de edad, con documentación de forma asistólica espontánea o inducida por inclinación, y exclusión de disfunción intrínseca del nodo sinusal o del nodo AV.
Al igual que la estimulación cardiaca, el hecho de que la cardioneuroablación pueda ser eficaz no significa que sea siempre necesaria. La cardioneuroablación y la estimulación cardiaca deben ser las últimas opciones, tras el fracaso de las terapias conductuales, no farmacológicas y farmacológicas, y sólo deben considerarse para aliviar los síntomas en una pequeña cohorte de pacientes muy seleccionados, es decir, los afectados por formas graves de síncope reflejo con recurrencias frecuentes que alteran la calidad de vida obligando a los pacientes a buscar una intervención y se asocian a un alto riesgo de lesión, a menudo debido a la ausencia de pródromos.
Referencias:
- Europace. - Clinical controversy: methodology and indications of cardioneuroablation for reflex syncope