Las masas cardíacas representan un desafío clínico por su heterogeneidad, incluyendo tumores benignos, malignos y seudotumores. Aunque la biopsia ha sido tradicionalmente el estándar de oro, su naturaleza invasiva limita su aplicación. La imagenología multimodal no invasiva ha emergido como una herramienta central, destacando la necesidad de estandarización en protocolos y enfoques diagnósticos. Este artículo revisa el rol de estas técnicas en la práctica clínica, sus fortalezas y limitaciones, y su potencial para optimizar el manejo de pacientes con masas cardíacas.
Clasificación y características generales
Las masas cardíacas incluyen:
- Tumores benignos: Representan entre el 75 % y 90 % de los casos. En adultos, el mixoma predomina, mientras que en niños son más comunes otros histotipos.
- Tumores malignos primarios: Los sarcomas son los más frecuentes, seguidos por linfomas y mesoteliomas. Su pronóstico es generalmente desfavorable.
- Seudotumores: Incluyen trombos, quistes, lipomatosis, y variantes anatómicas como la red de Chiari.
El avance tecnológico ha incrementado la detección incidental de estas masas, subrayando la necesidad de enfoques diagnósticos integrados.
Métodos de imagenología
Ecocardiografía
Es el método inicial en el estudio de sospechas de masas cardíacas. Su disponibilidad, bajo costo y capacidad para evaluar la morfología y función cardíaca son ventajas clave.
- Indicaciones: Primera línea en masas sospechosas. La ecocardiografía transesofágica es útil para masas pequeñas o móviles.
- Fortalezas: No utiliza radiación, es accesible y permite monitoreo longitudinal.
- Limitaciones: Dependiente de la calidad de las ventanas acústicas, con limitaciones para caracterizar tejidos o valorar infiltraciones.
- Avances: La ecocardiografía 3D en tiempo real mejora la evaluación volumétrica y relacional. Los estudios con contraste permiten diferenciar tumores vasculares de trombos.
Resonancia magnética cardíaca (RMC)
Considerada el estándar de oro no invasivo para caracterización de tejidos.
- Indicaciones: Evaluación de masas con localización incierta o sospecha de malignidad. Es especialmente útil para seguimiento postquirúrgico.
- Fortalezas: Alta resolución espacial y capacidad de caracterizar tejidos, incluyendo infiltraciones.
- Limitaciones: No apta para pacientes inestables, dispositivos incompatibles o claustrofobia.
- Avances: Mapas paramétricos (T1, T2, T2*) permiten cuantificar tiempos de relajación y estimar volumen extracelular, mejorando la precisión diagnóstica.
Tomografía computarizada (TC)
Complementa la RMC, especialmente en masas calcificadas o cuando la RMC está contraindicada.
- Indicaciones: Planificación quirúrgica, evaluación de relaciones anatómicas y caracterización de calcificaciones.
- Fortalezas: Resolución espacial superior y adquisición rápida.
- Limitaciones: Uso de radiación y contraste yodado.
- Avances: Tecnología de conteo de fotones y modelos 3D mejoran la evaluación estructural y funcional.
Tomografía por emisión de positrones (PET)
Indicada en casos de resultados inconclusos con RMC o TC.
- Fortalezas: Alta sensibilidad para detectar malignidad mediante el metabolismo de la glucosa.
- Limitaciones: Baja especificidad en tumores benignos con alta actividad metabólica o procesos inflamatorios.
- Avances: PET/RMC híbrida mejora la caracterización sin aumentar significativamente la exposición a radiación.
Algoritmo diagnóstico
- Inicio con ecocardiografía: Identifica y localiza masas, diferenciando variantes anatómicas.
- Confirmación y caracterización: Utilización de RMC para evaluar características específicas.
- Evaluación avanzada: TC en casos de calcificación o PET para malignidades metabólicamente activas.
El enfoque multimodal permite una caracterización más precisa y una planificación terapéutica adecuada.
Rol de la biopsia
Aunque sigue siendo el estándar de oro para diagnóstico histológico, su uso está reservado para masas con patrones infiltrativos o obstructivos y en la diferenciación de sarcomas y linfomas.
Aplicaciones emergentes y futuras
- Radiomics: Uso de inteligencia artificial para extraer datos no visibles, mejorando la detección y caracterización de masas.
- Nuevas técnicas terapéuticas: Ablación por radiofrecuencia guiada por ecocardiografía ofrece una opción para pacientes no aptos para cirugía.
Conclusión
La imagenología multimodal representa el futuro en el diagnóstico y manejo de masas cardíacas, ofreciendo precisión diagnóstica, optimización de recursos y mejores resultados clínicos. La colaboración interdisciplinaria es esencial para implementar estas herramientas de manera eficiente, asegurando el mejor cuidado para los pacientes.
Referencias:
- JACC CardioOncol. - Multimodality Imaging in the Diagnostic Work-Up of Patients With Cardiac Masses: JACC: CardioOncology State-of-the-Art Review