¿Son los cigarrillos electrónicos eficaces para dejar de fumar?
Según un estudio recientemente publicado en The Lancet, los cigarrillos electrónicos son al menos tan eficaces como los parches de nicotina para lograr la para la abstinencia del hábito tabáquico. Su uso se asocia, además, a una baja incidencia de efectos adversos.
Los cigarrillos electrónicos son dispositivos capaces de vaporizar nicotina por inhalación, sin aportar al organismo el resto de las toxinas nocivas del tabaco. Desde su aparición en el mercado en 2004, la venta de estos dispositivos se ha disparado, siendo muchas las personas que los emplean para dejar de fumar. Sin embargo, hasta la fecha, no disponemos de ensayos aleatorizados que estudien la eficacia real de los cigarrillos electrónicos en la deshabituación tabáquica.
El presente estudio tuvo como objetivo evaluar si los cigarrillos electrónicos con cartuchos de nicotina fueron más eficaces para dejar de fumar que la nicotina en parches, e incluyó una comparación ciega con los cigarrillos electrónicos que no contienen nicotina. Para ello, se diseñó un ensayo aleatorizado para demostrar superioridad, y se llevó a cabo en Auckland (Nueva Zelanda) entre septiembre de 2011 y julio de 2013. Los fumadores de al menos 18 años que querían dejar de fumar, fueron aleatorizados a 16 mg de nicotina en cigarrillos electrónicos, parches de nicotina (un parche de 21 mg al día) o cigarrillos electrónicos placebo (sin nicotina) . La aleatorización fue estratificada por etnia , sexo, y nivel de dependencia a la nicotina. La intervención duró 12 semanas y todos los participantes recibieron apoyo conductual a través de llamadas telefónicas. El end point primario fue la abstinencia tabáquica continuada a los 6 meses verificada bioquímicamente (concentración de monóxido de carbono en el aire exhalado <10 ppm), el primer análisis se realizó por intención de tratar.
De las 1.293 personas que fueron evaluadas, 657 cumplían criterios de inclusión. 289 sujetos fueron asignados a cigarrillos electrónicos con nicotina, 295 a parches con nicotina y 73 a cigarrillos electrónicos placebo. La abstinencia continua del hábito tabáquico a los seis meses se verificó en el 7,3% de los pacientes del grupo de cigarrillos electrónicos con nicotina, en el 5,8% de los sujetos del grupo de parches de nicotina y en el 4% del grupo de los cigarrillos electrónicos sin nicotina, sin embargo estas diferencias no fueron estadísticamente significativas (la diferencia de riesgo para el cigarrillo electrónico con nicotina vs. parche fue de 1,51; IC: -2,49 a 5,51). Tampoco se observaron diferencias significativas en los eventos adversos entre los grupos. Los autores señalan que los porcentajes de abstinencia logrados fueron sustancialmente menores a lo esperado, por lo que el estudio no dispone de poder estadístico suficiente para concluir la superioridad de ningún tratamiento respecto al otro. Al menos, hemos de señalar que en los análisis post-hoc de no inferioridad (utilizando un límite de no inferioridad del 5% para la diferencia de riesgo), los cigarrillos electrónicos con nicotina se mostraron, al menos, tan eficaces como los parches de nicotina para el abandono del tabaquismo.
Estamos pues, ante un estudio un tanto desesperanzador respecto a nuestra lucha contra el tabaco, dado que muestra unas tasas de abandono bastante bajas pese a una intervención reglada. Nos lleva a pensar, también, que son necesarios nuevos estudios aleatorizados, que nos indiquen qué terapia de sustitución de nicotina es la más efectiva para nuestros pacientes.
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