La planificación del tratamiento hipolipemiante es clave en la enfermedad vascular ateroesclerótica

Este artículo de consenso multidisciplinar aborda los desafíos y estrategias para mejorar el tratamiento de las dislipemias en pacientes con enfermedad vascular ateroesclerótica (EVA). A pesar de los avances en terapias hipolipemiantes, como estatinas, ezetimiba y nuevos fármacos inhibidores de la PCSK9, la consecución de objetivos de colesterol LDL sigue siendo insuficiente, incluso en pacientes de alto y muy alto riesgo cardiovascular.

Las principales barreras identificadas son:

• Infrautilización de combinaciones de fármacos.
• Falta de organización en el seguimiento médico 
• Escasa adherencia al tratamiento.
• Falta de coordinación entre niveles asistenciales.

Se propone un enfoque estructurado basado en medir, organizar y tratar, para personalizar y planificar el tratamiento hipolipemiante según el perfil de riesgo del paciente, incorporando herramientas como telemedicina, inteligencia artificial, estrategias de educación para mejorar la adherencia así como hacer partícipe al propio paciente. 

Este documento es de gran valor por varios motivos:

1. Enfoque integral y multidisciplinar: Participan 9 sociedades científicas, lo que fortalece la visión conjunta y práctica del manejo clínico real.
2. Cambio de paradigma en el tratamiento: Se critica el abordaje “escalonado” clásico por retrasar el control óptimo de LDL, y se promueve un enfoque “directo al objetivo”, más agresivo desde el inicio enfatizando lo defendido en el documento de consenso anterior centrado en el uso del tratamiento hipolipemiante. 
3. Importancia del seguimiento estructurado: El artículo enfatiza que iniciar tratamiento no es suficiente si no se acompaña de un seguimiento protocolizado y coordinado.
4. Novedades tecnológicas: La propuesta de usar consultas virtuales, alertas automatizadas y algoritmos de inteligencia artificial es especialmente innovadora, alineándose con los avances de la medicina digital.
5. Autocrítica al sistema sanitario: Reconoce carencias organizativas en la continuidad asistencial. La falta de rutas asistenciales claras después de eventos agudos es una realidad preocupante.
6. Carácter propositivo: No solo se identifican problemas, sino que se ofrecen soluciones concretas adaptables a diferentes entornos sanitarios, lo que le da un enfoque muy práctico.

Se propone en las figuras del artículo, el abordaje del paciente con EVA,  desde el tratamiento, tanto desde el punto de vista farmacológico  y del seguimiento, como los diferentes escenarios clínicos en función de las características de la presentación de la enfermedad vascular. 

Este documento representa un paso importante hacia una medicina más proactiva, personalizada y colaborativa en el tratamiento de la dislipemia en EVA. Resalta que tener fármacos eficaces no basta: es imprescindible medir bien, organizar mejor y planificar de forma individualizada. La clave está en superar barreras asistenciales, mejorar la adherencia y fomentar una verdadera coordinación entre especialidades y niveles asistenciales.