La fragilidad y el deterioro cognitivo son trastornos geriátricos que conducen a malos resultados de salud entre los adultos mayores con enfermedades cardiovasculares. Se desconoce la asociación entre sus patrones temporales de desarrollo y el riesgo cardiovascular.
Este estudio pretende examinar los resultados cardiovasculares a 5 años según el patrón de desarrollo de la fragilidad y el deterioro cognitivo en adultos mayores sin antecedentes de enfermedad arterial coronaria.
Se utilizó el National Health and Aging Trends Study, vinculado a los datos de Medicare. La fragilidad se midió utilizando el fenotipo de fragilidad física. El deterioro cognitivo se midió utilizando la Entrevista de Detección de Demencia AD8, midiendo el rendimiento cognitivo, o autoinforme del paciente o cuidador para un diagnóstico dado por un médico. El resultado primario fue la incidencia de eventos cardiovasculares adversos mayores a los 5 años.
De un total de 2.189 participantes en el estudio mayores de 65 años, el 38,5% eran varones. En esta población de estudio, 154 (7%) participantes desarrollaron fragilidad primero, 829 (38%) desarrollaron deterioro cognitivo primero, y 195 (9%) participantes desarrollaron ambas simultáneamente (grupo fragilidad-deterioro cognitivo). Aquellos que desarrollaron fragilidad y deterioro cognitivo simultáneamente eran mayores, mujeres y tenían múltiples enfermedades crónicas. El grupo frágil-deterioro cognitivo tuvo el mayor riesgo de eventos cardiovasculares adversos mayores (HR: 1.81; 95% CI: 1.47-2.23) seguido del grupo frágil primero (HR: 1.46; 95% CI: 1.17-1.81) y deterioro cognitivo primero (HR: 1.31; 95% CI: 1.15-1.50). La fragilidad primero se asoció con un mayor riesgo de ictus (HR: 1,49; IC 95%: 1,06-2,09) en comparación con el grupo sin ninguna de ellas.
El desarrollo simultáneo de fragilidad y deterioro cognitivo se asocia con un mayor riesgo de resultados cardiovasculares adversos incluyendo la muerte en comparación con el desarrollo de cada síndrome por separado. Los diagnósticos para detectar fragilidad y deterioro cognitivo son críticos en la evaluación del riesgo cardiovascular en la población anciana.
Referencias:
