Uso de los nuevos anticoagulantes orales en pacientes que reciben antiagregación por un Síndrome Coronario Agudo: metaanálisis
Metaanálisis que evalúa la eficacia y seguridad de los nuevos anticoagulantes orales en pacientes que han sufrido un Síndrome Coronario Agudo y se encuentran antiagregados. Según los autores, no existe un beneficio neto en el uso de los nuevos anticoagulantes en este grupo de pacientes, con respecto a placebo.
A pesar de que los pacientes que han presentado un síndrome coronario agudo (SCA) son tratados con doble terapia antiplaquetaria, permanecen en riesgo de presentar nuevos eventos tromboembólicos. En este contexto, no es bien conocido qué papel pueden jugar los nuevos anticoagulantes orales como los inhibidores del factor Xa y los inhibidores directos de la trombina. El objetivo del estudio fue, por tanto, evaluar la eficacia y seguridad de los anticoagulantes de nueva generación en comparación con placebo en pacientes con un SCA que reciben doble terapia antiplaquetaria. Para dar respuesta a esta hipótesis, los autores diseñaron un metaanálisis en el que se incluyeron todos los estudios que habían evaluado los anti-Xa o los inhibidores directos de la trombina en pacientes con un SCA y terapia antiagregante dual. Los indicadores de eficacia fueron la trombosis del stent, mortalidad global y un evento combinado de eventos isquémicos mayores. Los indicadores de seguridad fueron los eventos mayores de sangrado según los criterios del grupo TIMI. El beneficio clínico neto se calculó como la suma del evento isquémico combinado y los sangrados mayores. Se evaluaron un total de 7 ensayos clínicos que englobaron a más de 30.000 pacientes con un SCA, doble antiagregación y un nuevo anticoagulante oral (ximelagatrán, darexabán, dabigatrán, apixabán y rivaroxabán). Globalmente, el uso de estos nuevos anticoagulantes orales se asoció a un incremento significativo de eventos de sangrado (OR 3,03; IC 95%: 2,20-4,26, p <0,001). También se objetivó un descenso significativo (aunque moderado) del riesgo de trombosis del stent y del evento isquémico combinado, sin diferencias en la mortalidad global. Lo más interesante de los resultados es en lo concerniente al beneficio clínico neto, sin encontrarse ventajas con la asociación de los anticoagulantes (OR 0,98; IC 95%: 0,90-1,06, p=0,57). Los autores concluyen que el uso de los nuevos anticoagulantes orales añadidos a la doble terapia antiplaquetaria no aporta un claro beneficio clínico en pacientes que han sufrido un SCA. Habrá que ver si existe un contexto clínico de interés en el que este tipo de tratamiento (triple terapia) tiene su lugar, pues en muchos de ellos la dosis utilizada es diferente a la recomendada para, por ejemplo, prevención del ictus en fibrilación auricular, arritmia que frecuentemente suelen tener este tipo de pacientes.
Enlaces: